SEGÚN FREUD, LA CACA Y EL ORO SON LO MISMO
A long time ago, cuando Peter Jackson adaptaba El Señor de los Anillos, narraba y re-creaba en simultáneo. El poder de la trilogía no se sostenía por la pericia de una narración épica; las aventuras de Tierra Media valían doble: por el relato y por la coherencia audiovisual con la que Peter Jackson se apropiaba de Tolkien.
El Señor de los Anillos fue absorbido por la esencia del cine. Libros que trascendieron como la mejor metamorfosis de las letras a la pantalla. Semejante hito se obtuvo porque Tolkien fue un demiurgo que no dejó nada librado al azar y porque Peter Jackson quiso igualarlo en obsesión sin superarlo en creatividad.
El Señor de los Anillos, la trilogía fílmica, no se conformó con El Señor de los Anillos, la trilogía literaria. Peter Jackson y sus súbditos estudiaron TODA la obra de Tolkien; licuaron El Hobbit y El Silmarillion para que Tierra Media existiera cinematográficamente sin fisura alguna. Peter Jackson jamás tuvo que poner notas al pie de página porque la lógica interna era irreprochable. Meticuloso diseño de arte para cada cultura. Buenas actuaciones para humanizar a los personajes. Pasmosos efectos especiales para que lo fantástico sea tangible. Concentración para contar infinitas líneas argumentales. Y por sobre todas las cosas, respeto ante esa metáfora de ambición que era el anillo.
Cuando en 2003 Frodo se iba en un barco con los elfos, todo concluía serena y sabiamente. Peter Jackson se ganaba una gloria honesta, esa gloria de los que juegan limpio.
El Hobbit: Un Viaje Inesperado, es el primer sorete que nos cae en la cara junto a otros dos que vienen pujando por el ano de Peter Jackson.
Pocos razonamientos bastan para entender la ausencia de méritos de este mainstream embadurnado en caca.
Si Tierra Media se re-creó para El Señor de los Anillos, acá no existirá la sorpresa de una reversión: los elfos son elfos, los enanos, enanos y Gandalf, Ian McKellen.
El Hobbit es un librito anecdótico, humorístico, escrito por Tolkien para entretener a sus hijos. Todo sucede rápido, sin histeria, amablemente. Peter Jackson pretende que esta gema literaria crezca hasta alcanzar una montaña de estiércol de 9 horas de altura. Que por favor alguien me explique porqué un artista quiere sostener tamaña mentira.
Bah, la prueba es la misma película. Si 20 páginas alcanzaban para el capítulo introductorio de El Hobbit, “Una tertulia inesperada”, aquí se ocupa nada menos que una hora, con escenas en casa de Bilbo dilatadas hasta la agonía. Se multiplican los planos de un enano super-sexy (?), y para parchar la vergüenza de un vacío narrativo, se recurren a flashbacks larguísimos subrayando la mala suerte de Thorin, un enano líder y menos sexy.
Insultante es la caradurez con la que Peter Jackson calca el esquema de La Comunidad del Anillo. Es decir: lo calca, ni siquiera lo copia con la picardía de un estudiante rebelde.
Un Viaje Inesperado se desmenuza en: 1. prólogo grandilocuente que explica cómo dragón se va a dormir a una bóveda de oro. 2. Bilbo tranquilo en la comarca hasta ser secuestrado para el viaje. 3. Viajeros descansando en Rivendell y Galadriel robando cámara. 4. Siguen viaje por el interior de una montaña y el set se cae a pedazos. 5. La cosa concluye con un amanecer y un horizonte que no muestra nada. La Comunidad del Anillo al menos proponía un choque étnico, pero acá 13 enanos se tiran pedos y eructan.
Entristece ver a Ian McKellen abducido para filmar un sinsentido cuando le quedan pocos años de vida. Humedece el alma escuchar las partituras que le sobraron a Howard Shore de El Señor de los Anillos. Despierta ira que Gollum se convierta en una caricatura con una esquizofrenia compacta. El carisma de Gollum consistía en desplegar una psicología compleja a lo largo de varias escenas; aquí es un loquito sobreactuado, que entrega un paquete de sus morisquetas en 15 minutos.
Pero el error más importante de la película, el conclusivo para asfixiar cualquier esperanza, es que El Hobbit como libro era una aventura pequeña y calculadamente naïf. El Hobbit como película roba la estética sombría de El Señor de los Anillos y como resultado nos queda una neurosis que violenta la trama. Se aplican mantos de oscuridad sobre una anécdota infantil, por eso El Hobbit no llega nunca a ser creíble ni sincera.
Sólo resta aguardar algunos años para ver cómo un raquítico Peter Jackson se arroja a un volcán abrazando este excremento fílmico que al defecarse hizo una curiosa formita de anillo.
Calificación: 0 morenaux
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Título: El Hobbit: Un Viaje Inesperado
Título original: The Hobbit: An Unexpected Journey
Año: 2012
País: EEUU, Nueva Zelanda
Duración: más de lo que aparentan sus 169 minutos.
Dirección: Peter Jackson
Guión: Fran Walsh, Philippa Boyens, Peter Jackson, Guillermo del Toro (basada en la novela de Tolkien)
Producción: Philippa Boyens, Carolynne Cunningham, Toby Emmerich, Callum Greene, Alan Horn, Peter Jackson, Ken Kamins, Eileen Morgan, Fran Walsh, Zane Weiner
Intérpretes: Ian Mckellen, Martin Freeman, Richard Armitage, James Nesbitt, Ken Stott, Sylvester Mccoy, AIDAN TURNER
Dirección de Fotografía: Andrew Lesnie
Dirección de Arte: Simon Bright, Andy McLaren, Ben Milsom Sonido: Martin Kwok, David Farmer, Neil Aldridge
Música: Howard Shore
Montaje: Jabez Olssen
Te juro que cuando leí el título dije «baah, un navo que titula osando usar a Freud como algo intelectual». Pero después leí la crítica y está muy bien, y sobre todo adhiero en casi todo jajaa
Eso sí, creo que semejante despliegue técnico mínimamente merece algo de nota. Un 0 hasta suena medio irrespetuoso, ¿no? jeje
Saludos!
Hola!
Estoy de acuerdo que no merece un 0 (cero).
Es una calificación más para la política mainstream y menos para la película en sí.
Pero desligando el arrebato de la nota (también una posición política), y la turbulencia de la redacción, es triste que una trilogía histórica tenga que cargar con una sub-trilogía.
Pasó con Star Wars. Faltaría que en el 2017 Peter Jackson le venda la saga a Disney…
Haciendo una sicera critica de una critica: en muy mala.
No creo que se pueda permitir a alguien hacer una critica tan larga para decir nada, solo que no le gustó. Pero al menos se dió a la tarea de buscar muchas palabras complicadas (como para hacernos buscar al diccionario) en un afan de parecer inteligente, que a mucho pesar no funciona.
NN: equilibré palabras que buscaste en el diccionario con insultos surtidos. No jodás que la crítica se trata de eso: comentar si gustó o no.
Te habilito para que te disfracés de hobbit y vayás a defender la película en las boleterías de los cines.