DESDE LA IMITACIÓN HACIA LA CREATIVIDAD
Este fin de semana en la Sala Azucena Carmona del Teatro Real se desarrollará el El Arte del Mimo 2012, Ciclo que busca rescatar un género escénico que existe desde los griegos y los romanos en el Mundo Antiguo. Su arte pretende expresar una historia, sin mediar ningún tipo de lenguaje hablado. Su idioma, sus palabras, son los movimientos que ejecuta. Su gesticulación es simbólica y se manifiesta a través del lenguaje corporal.
En el marco del Ciclo, este Viernes 18 y el Domingo 20 de mayo a las 21:30 hs., se presentara, la obra cordobesa “El arte del mimo” y el Sábado 19 de Mayo a las 21:30 hs. la obra de Buenos Aires “La fisura”, ambas con dirección de Alberto Ivern.
:: Viernes 18 y el Domingo 20 de Mayo :: 21:30 hs.
“El arte del mimo”
Es un espectáculo donde se seleccionaron historias de los protagonistas: repertorios, historias llenas de humor y otras que marcan algunos contenidos que hacen a la naturaleza humana.
:: Sábado 19 de Mayo :: 21:30 hs.
“La fisura”
Un hombre y una mujer. Entre el deseo y el miedo. Se buscan, se intuyen. En una ciudad de espejos y maniquíes. Como locos, como ratas, anhelan un lugar donde trabajar, donde comer, donde jugar… sin ser pateados como una pelota.
No quieren ser esculturas perfectas, derritiéndose. No quieren ser el sueño de otros. Sólo quieren amarse.
El mimo según Alberto Ivern
El Mimo nace junto con la danza y el teatro en los primitivos ritos de imitación, pero ha comenzado a sistematizarse, como disciplina teatral independiente, recién a fines del siglo XX. Para la caracterización de personajes apela tanto al mimetismo como a la composición abstracta pero dando preponderancia a las opciones que brinda el propio cuerpo del actor por sobre el vestuario o maquillaje. El mimodrama se articula básicamente a partir de las acciones físicas estructuradas poéticamente frente a un espectador. Para la expresión de las sensaciones (exteroceptivas y propioceptivas) las emociones y las ideas (intenciones), los actores mimos apelan a la acción natural remarcada es decir a una ponderación del lenguaje “analógico” en particular al lenguaje no verbal por sobre el lenguaje “digital” de las palabras. A lo largo de su breve historia han aparecido mimos que utilizan códigos herméticos (que el espectador debe aprender a descifrar) y otros que prefieren reducir al mínimo dichos recursos para hacer lugar a la comunicación “inevitable” del “cuerpo en acción”. El entrenamiento básico tiene por objeto ayudar al estudiante de Mimo a recuperar capacidades de sensopercepción y de acción biodinámica: a partir de sensaciones y emociones que lo afectan en la historia o drama representado. Luego le aporta otros recursos técnicos para resolver la ambientación y contexto espacio-temporal de las acciones de los personajes (espacio evocado) y la puesta en escena (espacio escénico). En su libro “El Arte del Mimo”, Alberto Ivern propone y ejemplifica con ejercicios prácticos, un modelo para la investigación, el entrenamiento, la actuación, la mimodramaturgia, y la dirección de obras de mimo.
Lugar: Teatro Real (San Jerónimo 66)
Valor de las Entradas: $ 35 general – $ 20 estudiantes y jubilados